María Sainza, investigadora pesquera

Me llamo María y trabajo en el Centro Oceanográfico de Vigo del Instituto Español de Oceanografía desde hace ya muchos años. Estudié biología  y como el mar es una constante en mi vida, acabé especializándome en  zoología marina. ¿Mi trabajo? Doy edad a los peces que pescamos y  nos  comemos…

Mis comienzos de observadora pesquera

5.septiembre.2018

¿Qué os parece si empiezo este blog contándoos como llegué hasta aquí? Pues aquí va mi historia:

Gracias al título de bióloga, mi insistencia y la ilusión de llegar a trabajar en un centro de investigación marina, conseguí varios contratos como muestreadora a bordo de barcos que iban a pescar en mares muy lejanos: el calamar y la merluza a las Islas Malvinas o los crustáceos a Somalia.

Durante meses convivía y trabajaba codo con codo con el personal de estos barcos. Mientras duraba la marea, la tripulación se convertía en una familia, con la que tenía que compartir trabajo y tiempo libre en un espacio común muy reducido. A esto hay que añadir temporales, humedad, frío, calor, soledad, … Y a pesar de todos estos inconvenientes, ahí estaba yo, tan feliz. Fue toda una experiencia que me ayudó a conocer al sector pesquero desde dentro.

Guardo un recuerdo muy especial de esta etapa “marinera”, unido a mi eterno agradecimiento a todo el personal de los barcos en los que estuve embarcada donde me sentí como una tripulante más. En todas las mareas se despertaba un verdadero interés científico por parte de la tripulación con curiosidad por conocer los nombres científicos de los peces que se capturaban, conocer la edad de los peces o saber por qué era capaz de distinguir un pez macho de un pez hembra. A cambio, los pescadores me enseñaron a calcular cuánto y qué pescado venía en el aparejo, a localizar estrellas y constelaciones en el cielo, a avistar en la lejanía otros barcos, aves marinas, ballenas, delfines, …

Luego vinieron más campañas de pesca, pero estas ya fueron diferentes, porque ya formaba parte de un equipo de científicos y además se hacían a bordo de un barco de investigación oceanográfica: el Cornide de Saavedra. En estas campañas nos dedicábamos a estudiar de manera integrada los recursos de una zona pesquera en Terranova (Canadá) llamada Flemish Cap.

¿Y en la actualidad a qué me dedico? Pues a estudiar la biología de peces que forman parte de nuestros menús diarios y que son tan conocidos como la merluza, el congrio, el abadejo, el salmonete o la faneca. En mi equipo estudiamos el crecimiento de estas especies para poder conocer a qué edad se reproducen machos y hembras, cuántos huevos ponen y cada cuánto tiempo, cuándo y dónde se reproducen, los años que viven, qué profundidades habitan, … Una información fundamental para una gestión sostenible de los recursos pesqueros.

A lo largo de estos meses os iré contando más cosas sobre investigación pesquera, no dejéis de leer…

¡Hasta la próxima!

Un proyecto de:
ieo
Con la colaboración de:
FECYT